El trabajo de un blogger nunca termina.
Hay una presión constante para seguir creando contenido que entretenga, inspire, y haga que la gente actúe.
Esto hace que bloguear sea algo que requiere de mucho trabajo de mantenimiento.
Para conseguir ventaja, no tienes otra opción que sumergirte completamente en el espacio digital, que siempre está en constante evolución.
En pocas palabras, bloguear sólo es para los valientes.
Después de llevar en esto más de diez años, te puedo aconsejar algo: Cada gota de sangre, sudor y lágrimas que se requiere para hacer crecer un blog, merece la pena.
¿Estás de acuerdo conmigo?
Así parece. Una contundente cantidad de 6.7 millones de personas bloguean en sitios de blogging, y 12 millones de personas lo hacen en redes sociales.
Para algunos, es una manera de contribuir a los objetivos de su negocio.
Para otros, bloguear es directamente su negocio.
Sólo echa un vistazo al caso de Darren Rowse. Su blog personal que habla sobre blogging es el pilar de su negocio de varios millones de dólares.
Independientemente del nicho en el que estés, si ya llevas tiempo blogueando, quizá te hayas hecho estas preguntas.
«¿De verdad vale la pena invertir mi tiempo y esfuerzo blogueando?»
«¿Debería cerrar mi blog?»
Y estas son preguntas válidas.
En este artículo, te ayudaré a encontrar respuestas válidas.
Primero, veremos algunas razones «no válidas» por las cuales podrías sentir la urgencia de tirar la toalla, y cómo superarlas.
¿Por qué enfocarte en lo negativo?
No quiero que tomes una decisión definitiva en base a problemas que pueden ser solucionados fácilmente.
Simplemente podría estar utilizando la estrategia incorrecta.
Después, hablaremos de las circunstancias que podrían justificar que quieras cerrar tu blog.
Empecemos.
Por Qué Bloguear es Difícil y Por Qué Deberías Hacerlo de Todas Formas
En resumen, esto es lo que pasa.
Para que tu blog gane tracción, debe haber varios elementos armonía.
- Tu segmentación tiene que ser precisa.
- Tu contenido tiene que ser de muy alta calidad.
- Tu estrategia de RRPP tiene que ser brillante.
Y eso es sólo el principio.
Cada uno de estos elementos tiene detalles que igualmente deben ser trabajados a fondo.
¿Es un trabajo difícil? Sí, pero las recompensas pueden ser enormes.
Puedo decirte que, sin lugar a dudas, bloguear ha sido una de las mejores decisiones que he tomado con mi negocio. Me ayudó a atraer una enorme y leal audiencia de manera orgánica.
Es por esto que me motiva que el 53% de los marketers consideran que el contenido de su blog debe ser su prioridad.
Con las tácticas correctas, se cosechan las recompensas.
Tú puedes hacer lo mismo.
Esta es una visión general de lo que puedes conseguir blogueando:
- Atraer a la audiencia correcta.
- Convertir a tus lectores en leads cualificados al aportarles mucho valor.
- Cerrar un negocio ideal al convertir esos leads en clientes.
- Complacer a tus clientes hasta el punto de que se conviertan en embajadores de tu marca.
En resumen, bloguear es una poderosa estrategia para hacer hacer que la gente avance por estas cuatro etapas del funnel de inbound marketing.
Así se ve la metodología de inbound.
¡Esa es la asombrosa reacción en cadena que puedes conseguir al bloguear!
No me sorprende que sea considerada como una de las técnicas más populares de marketing de contenidos.
Incluso con todas las posibilidades que te da bloguear, podrías sentir que el éxito está fuera de tu alcance.
¿El resultado de esto?
Quizá sientas la necesidad de tirar la toalla.
A veces ese sentimiento es válido.
Claro, a veces hay razones por las que tu blog no tiene la evolución y los resultados que deseas.
Pero puedes darle la vuelta a esto.
Cómo hacer que tu blog trabaje para ti
Hay muchos problemas relacionados con hacer crecer un blog.
Algunos son más complicados que otros.
Estas son las tres razones más comunes y qué hacer al respecto.
Razón #1: No estás obteniendo suficiente tráfico hacia tu contenido.
Lo bueno es que no estás solo.
Este es un problema que ha desmotivado a muchos bloggers.
HubSpot revela que la generación de tráfico es uno de los principales retos del marketing para bloggers y dueños de negocio.
¿Es frustrante cuando nadie lee el contenido en el que inviertes horas? Claro que sí.
Pero esa es la naturaleza del juego.
Simplemente hay mucho contenido compitiendo por llamar la atención al mismo tiempo.
Así puedes solucionar tu problema de tráfico.
1. Domina las búsquedas orgánicas. Los motores de búsqueda son tu mejor aliado si sabes cómo crear contenido que amen.
La clave es optimizar tus publicaciones con las palabras clave que tus usuarios estén buscando.
2. Construye una lista de emails. Mi lista de correos es una de mis más grandes fuentes de tráfico. Puedes avisar a tu lista cada vez que publiques un nuevo contenido.
Si alguna vez planeas monetizar tu blog, tu lista de emails será uno de tus canales que te aporte más conversiones.
¿Necesitas pruebas?
El email es uno de los principales canales para generar leads (El 73% de los encuestados afirman esto).
3. Explota a tu tráfico actual. Si tu público objetivo en realidad no está convirtiendo, lo más probable es que esté pasando el tiempo en otro lado.
Descubre qué otras páginas visita tu público objetivo, y contáctalas para colaborar.
Puedes escribir artículos de invitado o co-crear contenido.
De cualquier manera, algunos de sus lectores seguramente se sentirán atraídos para visitar tu blog.
¿Cuál es la clave para resultar atractivo para los lectores de otro blog?
Estar seguro de que tu mensaje está alineado con los intereses y problemas de su audiencia.
4. Paga para promover tu contenido. El tráfico orgánico lleva tiempo y requiere de una estrategia para funcionar. Si no tienes ninguno de ellos, te desilusionarán tus resultados.
¿La solución?
Dirige tráfico cualificado a tus publicaciones.
Los Anuncios de Facebook son tu mejor apuesta. Son baratos y efectivos.
De hecho, el coste por clic promedio de los Anuncios de Facebook en cualquier industria es de apenas $1.72 dólares.
Razón #2: Los lectores no están interactuando con tu contenido.
La falta de interacción es otro problema común.
Casi siempre es porque los bloggers no tienen una fórmula para crear contenido que genere engagement.
De hecho, el 56% de los especialistas en marketing de contenidos coinciden en el hecho de que este es su reto principal.
Este es mi consejo para solucionar tu problema de engagement.
1. Ten muy claro quién es tu público objetivo. Cuando sabes quiénes son las personas a las que estás intentando llegar, es mas probable que puedas crear contenido que les interese.
Haz trabajo de detective para meterte en la mente de tus lectores. Después, puedes crear audience personas para capturar tus insights.
2. Escribe contenido de mejor calidad. Incrementar tu engagement simplemente puede ser una cuestión de escribir mejor. Un título cautivador, una introducción atractiva, elementos visuales llamativos, y un texto legible, son excelentes puntos por los que puedes comenzar para comprobar los resultados.
3. Sé proactivo al fomentar el engagement. Así se hace: Debes hacer que tu audiencia participe y reaccione.
Hazles preguntas, usa llamadas a la acción claras y persuasivas y participa en las comunidades que tienen que ver con tu blog.
Por ejemplo, puedes hacer preguntas al final de cada artículo de blog para motivar a tu audiencia a que te dejen más comentarios en tu blog.
Así:
Razón #3: No ves ningún crecimiento.
A veces los blogs crecen a pasos pequeños. Si bien esto es frustrante, no es inusual.
Incluso algunos de los bloggers más reconocidos han tenido que lidiar con esto en algún momento. ¡Me incluyo!
A menos que lleves blogueando durante todo un año sin interrupciones y no hayas visto progreso alguno, quizá esto ni siquiera sea un problema.
Si tienes la seguridad de estar ejecutando las estrategias correctas, dales algo de tiempo.
Sin embargo, hay algunas cosas que puedes hacer para acelerar el crecimiento de tu blog.
1. Haz mucho networking. El dicho «todo se resume en quién conoces,» se aplica al 100% en el mundo online.
Las conexiones que hagas con otros bloggers e influencers son claves. Después de haber establecido una relación, puede darse un sano intercambio de valor que beneficie a ambas partes.
2. Enfócate en construir un canal de distribución a la vez. Suena contradictorio enfocarse en una cosa a la vez cuando estás intentando crecer rápidamente.
Confía en mí. Funciona.
No inviertas tu tiempo y recursos en muchos canales distintos.
Me sorprende saber que el marketer promedio usa 13 tipos distintos de canales de distribución.
¡Es una locura!
Te recomiendo enfocarte en dominar un canal de distribución y después aprovechar tu éxito para construir los otros.
3. Sé consistente con tu calendario de publicaciones. Tener éxito en el blogging tiene que ver en gran parte con la frecuencia con la que publicas contenido para tu audiencia.
Cuanto más escribas, más tracción ganarás.
De hecho, se ha comprobado que una vez que escribas de 21 a 54 artículos de blog, tu tráfico puede aumentar en un 30%. De igual manera, si publicas más de 52 podrás ver un incremento del 77%.
Ahora que he compartido contigo algunas estrategias para ayudarte a hacer crecer tu blog, veamos la parte más interesante.
¿Cuándo está bien tirar la toalla? ¿Cuándo abandonar es lo más indicado?
Aquí te doy algunas razones válidas.
1. Ya no tienes conexión con el propósito de tu blog
Así funciona.
Cualquier trabajo que no te cautive, eventualmente terminará por agotarte.
Esto se aplica particularmente al blogging.
Si ya no estás interesado en el resultado, te será bastante difícil hacer todo el trabajo que se requiere.
Escúchame. No estoy diciendo que solamente trabajes en lo que te apasiona.
El propósito y la pasión no siempre suceden al mismo tiempo.
Puedes realizar tareas que no te encanten, pero aun así estás comprometido con el propósito.
Simon Sinek señala en esta charla de TED que la gente más exitosa del mundo siempre usa un principio general.
Este principio guía todas sus acciones en los negocios y en su vida privada.
¿Qué es?
El círculo dorado.
En la parte central del círculo está la famosa pregunta «¿por qué?»
Tu propósito es lo que determinará los pasos que tomarás para lograr tus metas.
¿Qué sería un «por qué» válido?
Simon dice que un objetivo monetario no califica como tal.
Una cantidad específica no es un propósito.
Si has perdido de vista el «por qué» de tu blog, puedes reconectarte con él o evaluar desde cero tu blog.
2. No tienes los recursos para mantener tu blog
Los blogs cuestan tiempo y dinero para prosperar.
Web hosting, diseño, software, y RRPP son sólo algunas de las cosas que pueden costarte bastante dinero.
¿Cuánto es bastante?
Pues dependerá de la escala de tu blog.
Puedes estar pagando desde unos cuantos cientos de dólares hasta varios miles de dólares al mes para mantener tu blog.
Sin mencionar que necesitas tener un presupuesto bastante amplio. De hecho, bloguear es una de las maneras más eficientes en cuanto a costes para construir una audiencia.
Los blogs activos atraen 6.9 veces más tráfico orgánico frente a lo que supone no tener un blog.
También hay muchas alternativas gratuitas a las herramientas que necesitas para hacer crecer tu blog.
¿Cuándo la falta de recursos puede convertirse en un problema?
En gran parte, cuando no tienes el tiempo para invertirlo en estrategias de marketing que funcionen.
Primero, el contenido de calidad es esencial. Puedes elegir crearlo tú mismo o externalizarlo.
Cuando estás en la etapa inicial de tu blog, quizá tiempo es lo único que necesitas.
Sin embargo, si quieres hacerlo crecer a un nivel en el que tengas tu propio equipo, necesitarás recursos.
¿Estás en la encrucijada de no tener ni tiempo ni dinero?
Quizá sea el momento de que consideres nuevamente mantener tu blog abierto.
3. Hay maneras más efectivas de lograr tus objetivos de negocio
El blogging es solamente una parte del marketing de contenidos.
Si bien es una de las técnicas más efectivas, no es tu única opción.
Quizá decidas que tu tiempo y dinero están mejor invertidos en otra iniciativa de marketing de contenidos.
Quizá un podcast o un canal de YouTube pueden ser más efectivos para generar leads para tu negocio.
El video, en particular, ha ganado mucha popularidad en los últimos años.
Probablemente esa sea la razón por la que el 48% de los marketers están planeando usar YouTube para distribuir su contenido durante el próximo año.
¿Cómo puedes saber con certeza si otro canal será más efectivo para conseguir tus objetivos?
Esto es lo que necesitas considerar.
- ¿Hacia dónde van tus objetivos de negocio?
- ¿Dónde puedes encontrar a tu audiencia ideal?
- ¿Hay algún canal que tu público objetivo frecuente más?
- ¿Vale la pena utilizar esos canales?
- ¿Cuánto tráfico puedes obtener de cada canal?
- ¿Será difícil convertir este tráfico en leads para tu negocio?
- ¿Cuál es el coste/beneficio de cada canal? ¿Cómo se compara esto con tu blog?
Estas preguntas te habrán dado algo en qué pensar.
Si determinas que tus intereses pueden cumplirse mejor utilizando otro canal en lugar de tu blog, adelante.
4. Bloguear no es el canal correcto para tu audiencia
Quiero hacer hincapié en la importancia de conocer a tu audiencia.
¿Quién va a consumir tu contenido? ¿Cuáles son sus preferencias? ¿Cómo es su conducta?
Es posible que tu audiencia no lea blogs.
A veces, es cuestión de adaptar el contenido de tu blog para el sector en el que estás.
A veces, quizá tengas que considerar un medio diferente de tráfico.
Y está bien.
El marketing está orientado a la gente.
Sus intereses siempre deberían ser el objetivo primordial.
¿Cómo puedes descubrir lo que tus lectores quieren?
Pregúntales.
Las encuestas son excelentes herramientas.
Aquí tienes algunas de las mejores prácticas para utilizar encuestas.
- Respeta el tiempo de tu audiencia al ser breve y directo.
- Da un incentivo para que completen la encuesta.
- Segmenta a tus suscriptores cuando se registren para recibir tu oferta gratuita.
5. Tu blog ya no es redituable
Para muchas personas, bloguear es su pan de cada día.
Invierten en su blog, a diario trabajan en él, y lo tratan como un negocio real.
Desde vender softwares hasta hacer marketing de afiliados, hay muchas maneras en las que los bloggers hacen dinero.
Aquí tienes una guía básica:
Como cualquier negocio, tu blog será vulnerable a fluctuaciones externas en el mercado. El infortunio aquí es lo agresivos que pueden ser los cambios en el marketing online.
Los algoritmos de los motores de búsqueda cambian, aparecen nuevos competidores, y el panorama general siempre está en constante cambio.
¿El resultado?
Los blogs que no evolucionan, mueren.
¿Cuál es la respuesta más apropiada cuando tu blog está cayendo en picado?
Si estás registrando pérdidas de forma consistente, vale la pena evaluar si deberías seguir blogueando.
Reconozco que no siempre será fácil levantarte nuevamente.
Quizá tengas un competidor enorme que tiene más recursos que tú y te supera en cada paso que das.
Quizá los canales de distribución de contenido que llegaste a utilizar, ya no son efectivos.
Cualquiera que sea la fuerza externa que hace que tus ganancias bajen, no podrás soportar seguir registrando pérdidas mes a mes.
Conclusión
Me encantaría reforzar el hecho de que bloguear no es fácil.
Es una estrategia inteligente. Hace maravillas para crear una audiencia leal. Es la estrategia perfecta de marketing de contenidos.
Pero esta es la realidad: Bloguear es un trabajo duro, y debes estar comprometido para obtener resultados.
Dicho esto, debes tomarte en serio la decisión de continuar o cerrar tu blog definitivamente.
En algunas instancias, entiendo por qué podría ser necesario.
Sin embargo, el blogging sigue siendo una de las herramientas más poderosas de marketing en la actualidad.
Los problemas que conlleva hacer crecer tu blog no son poco comunes.
De hecho, con las estrategias correctas puedes dar pasos agigantados.
Si te estás tomando en serio la posibilidad de cerrar tu blog, asegúrate de evaluar los beneficios y el coste de todas tus opciones antes de tomar una decisión definitiva.
¿Hay algún otro canal que sea mejor para satisfacer los objetivos de tu negocio?
De ser así, toma la decisión y haz el cambio.
Si no, quédate con tu blog.
Haz lo que esté mejor alineado con tus intereses, y no te arrepentirás.
¿Alguna vez has querido cerrar tu blog? ¿Qué te ayudó a tomar la decisión correcta?
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